lunes, 30 de junio de 2008

Comieron perdices o... ¿Fueron comidos?



Si la quieren ver... ¡No sigan leyendo!


La película: La de siempre. Medio de suspenso, medio de terror, sangre, monstruos, efectos especiales, sangre, muerte, desesperación, sangre, cuerpos mutilados, incoherencias, sangre...

El protagonista: El más vivo de todos. el que más se arriesga y sale ileso, el que siempre tiene razón. El que como quien no quiere la cosa, se convierte en líder. Al que se le ocurren las ideas, el que se da cuenta de las cosas.

La trama: Un grupo de desconocidos, todos con personalidades bien marcadas (ninguno normal), "luchan" en contra los monstruos malos en una batalla exageradamente despareja (la ventaja es del enemigo).

Llegando al fin: Faltan minutos para que termine y parece que nada tiene solución. Pero entonces el protagonista toma una decisión extremadamente arriesgada. Se lleva un par de gente para que mueran, y conducen a la salvación...

Conclusión preliminar: Una película más, tan predecible como el resto. Raya lo aburrido, lo monótono.

El final: Pero de repente... ¡NO se salvan! Y termina...

Conclusión: ¡Qué bajóoooon! Ni da... ¡¡Quiero mi final feliz!! ¡¡¡Exijo mi final feliz!!!

domingo, 29 de junio de 2008

Vacaciones de invierno

Me voy a matar... Es obvio.
Pero... A los golpes se aprende, y en algún momento tengo que aprender. ¡Mientras antes mejor!

Me quiero ir YAAA...

viernes, 6 de junio de 2008

Pooobre mi negrito...

- ¿Ya te enteraste?

- ¿De qué?

- No, no te enteraste...


Las malas noticias suelen anunciarse antes de llegar. Siempre está ese comentario "pre" que genera el suspenso. Ese instante previo en que todas las catástrofes pasan por tu cabeza. En mi caso suelen ser solo dos: "¿Quién murio?" u "¿Otra vez me chocaron el auto?". Afortunadamente (?) fue la segunda...

Y una vez más, fue un accidente, la culpa la tuvo el otro y yo... ¿A quién le echo la culpa? ¿Con quién me desquito?

Sí, ya sé que se arregla. Ya sé que me pagan, pero quién paga la desilusión y la amargura de ver esa imagen de auto roto. Quién paga los días sin auto, el tiempo perdido en trámites... Nadie, por supuesto.

Lo único que rescato es que no me pasó a mi, porque sino la bronca es triple.

Yo, personalmente, creo que ese auto se tiene que ir... Está maldito. A los otros rara vez un rayón, este sale y lo hacen mierda... Pobrecito.

=(

martes, 3 de junio de 2008

Que no llegue... ¿O que pase rápido?

Empieza esa parte del año en la que hay que entregar los trabajos, estudiar para los parciales, e IR a la facu, porque ya no quedan faltas por gastar. Esta es la parte del año en que no podemos parar de torturarnos pensando todas las cosas que tenemos que hacer, haciendo cronogramas de estudio que sabemos que no vamos a seguir, levantándonos más temprano para leer algo y terminar escribiendo el blog, cancelando salidas para luego quedarnos mirando el techo porque no nos podemos concentrar...
Y por supuesto también empezamos a pedirle favores al reloj. Eso si, todavía no me termino de decidir, no sé si quiero que el tiempo pase muy lento y yo llegue a hacer todo, o que pase muy rápido, me agarre como me agarre pero como sea, se termine...
Igual, no tiene sentido que lo decida porque el reloj no me va a escuchar. A menos de que a Cristina se le ocurra cambiarnos la hora de nuevo...