Podría haber tomado una brecha melancólica y decirte lo importante que sos, y la genialidad de nuestra amistad, tirarte flores un rato y esas cosas... pero no es mi estilo.
Podría haberme iluminado y haber encontrado una manera creativa de hacerte tributo, pero todos sabemos que la creatividad nunca me caracterizó.
Podría haber seguido pensando y pensando, pero ya me había aburrido de eso, asique decidí rememorar una situación que nos marcó de por vida y que jamás olvidaremos. Creo que todo está dicho a partir de lo siguiente:
She: Escucháme, ¿no viste mi cartera marrón?
Kike: Sí, la vi muchas veces.
She: Me refiero, si no viste dónde está.
Kike: ¿La perdiste?
She: No, sin embargo no la encuentro.
Kike: Si no la encontrás es que la perdiste.
She: No, a lo mejor me la robaron.
Kike: Yo no fui ¿Sospechás de alguien en especial o de alguien en particular?
She: Creo que fue la sirvienta.
Kike: No creo; a ella le robaron hace un mes.
She: ¿Y qué tiene que ver?
Kike: Que si ella es victima, también sea ladrona. O es victima o es ladrona. Al menos en las peliculas es así.
She: Yo vi una película donde robaban a un ladron.
Kike: Entonces debe ser ella: vamos a su casa. ¿No viste las llaves de mi coche?
She: No veo ni las llaves, ni veo tu coche.
Kike: ¿También te robo tus lentes?
She: No, creo que también se robaron tu coche.
Kike: No puede ser, lo compré hace un mes apenas.
She: Eso no importa. Yo había comprado mi cartera hace quince días y me la robaron.
Kike: ¿Es un ladron que roba cosas nuevas? Debe ser un niño.
She: ¿Sera el hijo de la sirvienta?
Kike: Ella nunca se casó.
She: Pero puede tener un hijo.
Kike: No lo habia pensado... tenés razón. Quizás nunca se casó porque sus novios descubrían que era una ladrona.
She: Y hasta seguramente que le robó a algun novio, a alguna amiga.
Kike: Mirá: ahora que lo decís, no lo dudo ni un poco ¿Sera robado su hijo?
She: Y, siendo como es, yo creo que sí.
Kike: ¿Robará cosas para ella o para venderlas?
She: ¿Para que va a querer ella un coche, si no sabía manejar?
Kike: O sea que roba para vender.
She: Sí, creo que sí... pero nadie vende un coche robado así como así. Tiene que tener contactos, otra gente... conexiones!
Kike: Debe formar parte de una organizacion.
She: Esas organizaciones los llevan a otras provincias, otros paises y los venden con papeles nuevos, permiso de circulacion, placas...
Kike: Pero, eso no lo pueden hacer si no tienen gente metida en el gobierno, que le consiguen sellos y papeles, de todo...
She: ¿A vos te parece que ella ande en eso?
Kike: Y ¿no viste la cara de santita que tiene siempre?
She: Sí, así como de demasiado buena ¿no?
Kike: ¿Qué hacemos? ¿La echamos?
She: ¿Estás loco? Pueden tomar represalias. Mirá si se enoja, o se da cuenta que la descubrimos, le cuenta a sus jefes y nos mandan un par de tipos y nos pasan la cuenta.
Kike: Entonces, nos conviene quedarnos con ella. Eso, de alguna manera, nos protege. Yo prefiero que esté ella robándonos, que ya la conocemos, y no que nos manden a alguien que entre por la ventana. Yo no quiero correr ese riesgo.
She: No, por Dios, eso ni pensarlo... ¿Y qué hacemos si se quiere ir a trabajar a otro lado?
Kike: ¿Por qué? ¿Te dijo algo?
She: No, pero el otro día la note con una cara medio así...
Kike: ¿Cómo "asi"?
She: Y, medio como así… Como cuando uno anda pensando algo.
Kike: ¡Será posible!... eso es lo único que nos faltaba.
She: Tenemos que convencerla de que no se vaya.
Kike: Aumentémosle el sueldo. ¿Qué te parece?
She: Pero, si estabamos ahorrando para las vacaciones...
Kike: ¡No las hacemos, y listo! ¿O vos preferis que entre un tipo por la ventana y te pegue un tiro?
She: Ni hablar, es cierto. El dinero se recupera, pero la vida no... aumentémosle; mirá, ya veremos a donde podemos ir, o en todo caso nos vamos el año que viene...
Kike: Sí... y la llevamos a ella, cosa que uno pueda viajar tranquilo y no con el miedo de que te roben acá o allá.
She: Por supuesto, después de todo la conocemos, es nuestra sirvienta, ¿no?
Kike: Tenés razón.